Toponimias.net

Didáctica de la historia

Convenio Andres Bello y el analisis de lasToponimias

Published by glaukopis under on 8:17


La enseñanaza de las toponimias tiene una gran importancia, en cuanto nos permite reconocer las caracteristicas materiales y socioculturales que toma una vital trascendencia, para designar el nombre de un lugar o espacio de un asentamiento humano determinado. A partir del enfoque planteado en el semestre, quisieramos dar una vital relevancia al hecho de que los nombres de algunos pueblos recorridos durante la ruta mutis, en el pasado mes de abril, pueden esconder mas que un marcado sincretismo un especial interes en hacer prevalecer los ideales de un sector social, que historicamente se hallan empoderado en los papeles protagonicos de nuestra historia. Es desde ahi, en cuanto al andamiaje teorico y logistico que se pretende montar desde el "Bicentenario de la Independencia" una postura esceptica y cririca, y como desde un futuro papel como docentes resistimos, adaptamos, y pensamos y lanazamos sobre el debate; recursos didacticos y metodologicos que puedan explorar estas cuestiones itinerantes y escondidos bajo un silencio complice de mas de doscientos años.

El convenio Andres Bello, ante nuestro sincero parecer, aunque trata de de fomentar una integracion "fraterna" entre pueblos que poseen caracteristicas en comun, en cuestiones mas avanzadas de la realidad evidente, material y practica; sus postulados pueden quedar en un mar de ambiguedades. Salvo lagunas excepciones
¿como hablar de integracion fraterna y reciproca cuando se viola la soberania de un pais vecino? solo para acometer los caprichos de un jefe de Estado, como por ejemplo, el de cometer una masacre, tras la busqueda de un dirigente guerrillero. A parte de esto nuestros paises cuentan con elementos diferenciados muy diferentes dentro de la constitucion de los "Estado Nacion" Colombia no deja de ser un caso sui-generis dentro del concierto regional latinoamericano: NO ha tenido dictaduras militares, salvo, la del general Rojas Pinilla, nos ufanamos de tener una de las mas solidas "democracias" y ni siquiera se ha consolidado una Estado Nacion, que representa el sentir mayoritario de las gentes con un conflicto interno en fases mas avanzadas de degradacion sistematica de un problematica social preocupante. El Convenio Andres Bello surge de la idea de un ministro de educacion colombiano llamado Octavio Arizmendi Posada ¡solo a un colombiano se le ocurre proponer una integracion fraterna solidaria de los demas paises, cuando no tiene integrado y freternizado su propio patio!

pretender integrar la educacion y el desarollo tecnologico, cientifico y cultural de nuestros paises con estructuras educativas distintas, donde el predominate de la enseñanza de la historia se monta sobre la negacion regional de los otros paises, para justificar una integracion regional, como si no compartieramos a pesar de lo que nos separa hitos y particularidades en comun. La historia en ese sentido deberia convertirse en la herramienta de la unificacion regional que especifique mas en lo que nos une que en lo que nos separa desde las elites, que necesitan una historia que les delimite campos de accion excluyente.

El Convenio Andres Bello a pesar de lo que hemos mencionado anteriormente, ha tenido notables innovaciones en el campo de la enseñanaza de la historia, la patria ha hecho investigaciones que leemos como un diagnostico de la realidad practica, ambigua, paradogica y dicotomica que caracteriza los procesos educativos de los paises miembros del convenio. Dentro de estos postulados creemos pertinete que la enseñanza de la historia pueden tener alcances innovadores muy interesantes que nos permitirian comprender que procesos sociohitoricos de dominacion, pudieron estar tras la fundacion de los asentamientos humanos, haciendo estas nociones enseñables en el aula de clase tomado los libros convencionales de la enseñanaza de la historia como puntos deconstructivos de partida, ya que en ellos no pueden llegar a ser la guia impositiva sobre lo que el maestro debe enseñar. Los libros deben ser cuestionados en sus contenidos y mas aun cuando detras de ellos pueden haber intereses politicos. Como en la investigacion planteada por Mario Carretero, sobre la integralidada de la enseñanza de la historia, donde ponia el ejemplo de que en Mexico a raiz de la firma del TLC con Estados Unidos y Canada hacia los los primeros años de la decada de los noventa, por ejemplo en los libros de texto escolar se omitian hechos relacionados con la guerra en que Estados Unidos usurpo gran parte del territorio mexicano.

Para nosotros las toponimias pueden encerrar conceptos que descubriendo pueden redescubrir la historia de los lugares a los que hace referencia. La enseñanza de estas toponimias, vinculados actividades ludicas, la multiplicidad de la imformacion que suministremos para llevar a cabo debates y talleres, la utilizacion de las nuevas tecnologias de la imformacion y la comunicacion para la divulgacion de nuestros planteamientos de forma fresca y contundente, estos pueden ser los medios mas representativos para poner en practica lo planteado a lo largo del semestre y la carrera. El reto es interesante si miramos que nuestro oficio ha entrado en los anaqueles de una baja autoestima profesional frente a otras especialidades que estan adentrandose en el ramo, dentro de un proceso de profesionalizacion y empresalizacion de la escuela. La autonomia del dicente puede ser afectada de formas considerable frente a desiciones de cuña empresarial de las directivas
institucionales, en el manejo y contenido de los curriculos, y de lo que se debe enseñar de acuerdo a las dispociones legales donde un numero considerables de paises del convenio se acogieron a los paradigmas neoliberales del libre mercado.

Introducción

Published by glaukopis under on 15:03



La investigación propuesta acerca de las toponimias, vendrá articulada con los propósitos de la Integración Regional que propone el Convenio Andrés Bello creado el el 31 de enero de 1970. En este se hace expresa la necesidad de pactar una integración educativa, científica, tecnológica y cultural como un proceso dinámico con el fin de desarrollar y mejorar el fin material y espiritual de los pueblos. De la misma manera, las Cátedras que propone la Integración Andrés Bello se definen así mismas como la búsqueda y la mejora en la calidad de un diálogo intercultural que permita reconocernos y respetarnos en la diferencia y en las afinidades, como vía para potenciarnos en el ámbito regional.

Ya desde 1992 el Convenio Andrés Bello viene desarrollando el proyecto Enseñanza de la Historia para la Integración y la Cultura que permiten establecer una perspectiva de convertir la enseñanza en una estrategia de integración. La producción en esta temática concluyó lo siguiente:

Los principales obstáculos para lograr la integración latinoamericana y para el respeto de los derechos humanos, se encuentran en la contradicción entre los valores históricos que afianzan las identidades nacionales y los que se requieren para la integración de una historia supranacional, por lo tanto es necesario promover la construcción de una historia común, en la que se reconozcan las ausencias y omisiones derivadas de distintas formas de discriminación y marginación[1]

No obstante, esta tendencia de la enseñanza de la historia tiene sus limitantes, en primer lugar los currículos planeados por el Convenio Andrés Bello, muy rara vez se llevan a cabo, en segundo lugar no se tienen en cuenta las condiciones precarias del ejercicio docente. Más sin embargo esta tendencia es innovadora en la medida en que sugiere un tratamiento renovado de los contenidos de los textos escolares y de otros materiales didácticos, en los que se incluyen las TIC (Tecnologías de la información y la comunicación.
-------------------------------------------------------------------
[1] Sandra Rodríguez, Wilson Acosta. Autores, problemas y debates en la investigación sobre la enseñanza de la historia (1990-2006) en X Jornadas Nacionales y I Jornada Internacional de Enseñanza de la Historia. Río Cuarto (Argentina), 17 al 19 de septiembre de 2008.

Toponimias ¡Una forma de nombrar el poder?

Published by glaukopis under on 13:34

Las toponimias evidencian la intencionalidad específica de lo que se quiere mostrar, divulgar y naturalizar como historia. Es obvio que esclarecen dinámicas de poder sobre determinadas culturas y sus visiones de mundo. Un ejemplo son los nombres hispánicos que se naturalizaron sobre el nativo, aunque hay contadas excepciones en donde el topónimo nativo sobrevivió ante el nombre conquistador.

La propia "toponimia" proviene etimológicamente del griego τόπος (tópos), "lugar" y ὄνομα (ónoma), "nombre". Es evidente que el lugar fundacional cumplía con ciertos requisitos para que se estableciera allí un asentamiento. Tal es el caso de San Sebastián de Mariquita (el nombre del cacique de Marqueta) o San Bartolomé de Honda. (Honda por los indígenas Ondaimas) en cierta medida aunque prevalece el topónimo indígena, va por delante el nombre de algún santo cristiano.

La pertinencia del tema de las toponimias, va enfocada hacia la necesidad de realizar una reconfiguración de los saberes históricos de nuestro país. Reconfiguración de un saber de los que tienen el poder de narrar la historia y allí entra a jugar nuestro papel como futuros profesores con énfasis de las ciencias sociales, como sujetos que analicen y cuestionen la historia oficial propuesta por las esferas del poder. Una versión desdibujada, errónea y conveniente para sus intereses.

La importancia de esta investigacion radica en la necesidad de demostrar que la enseñanza de la historia debe ser una labor interdisciplinar no avasallante que vaya mas allá de las ciencias sociales en donde se de lugar puentes de dialogo para enriquecer la practica pedagógica y el enfoque didáctico de la enseñanza de la historia. Esta propuesta busca dar a conocer, que por medio de las toponimias existen unas dinámicas de dominación, a la vez que permiten dar a conocer el origen de los diferentes asentamientos humanos pasando por el establecimiento de jerarquías y dinámicas sociales y económicas, además de demostrar la importancia dentro del estudio adelantado por la expedición botánica. Sumado a lo anterior esta recopilación de saberes permiten dar a conocer nuestra nación como un caldo de cultivo de la investigación científica y social digna de mostrar a las naciones del mundo. Esta demostración de conocimiento permite en cierta medida promover un intercambio equitativo de saberes que no sea avasallante, sino que permita contribuir al crecimiento intelectual y cultural de América Latina. Este es uno de los objetivos del convenio Andrés Bello que no se ha llevado a cabo. Nuestra labor radica en indagar e inculcar el sentido de nación a través del reconocimiento de saberes. Lamentablemente esos saberes que en realidad construyen nación son desconocidos. El grueso de la población se centra a partir de un sombrero vueltiao, un poncho, una camiseta de la selección Colombia, un disco de Juanes o de Shakira o un caballo de paso fino.

En un contexto donde se hace realmente evidente la desprofesionalización de nuestra práctica docente, (por ejemplo: que cualquier profesional realice una maestría en pedagogía y ejerza en el ámbito educativo), muchos docentes se han interesado por la instrumentalización simplista de su saber en campos de acción en donde su resultado no va más allá de la incertidumbre. Es tal la incertidumbre que ya no creen en su practica (solo la hacen efectiva dentro del aula). La formación docente debería ir enfocada en pensarse como actor político, pero el pensarse como actor político debe ir vinculado a la re categorización de su labor, es decir, en un cuestionamiento constante y deconstructivo de su propio quehacer profesional, en una mirada de su propio conocimiento impartido hacia los estudiantes. El maestro debe ir en pro de integrar a la comunidad educativa en el proceso de la difusión y la preservación de la identidad cultural de los pueblos, cuidar las raíces autóctonas, desarrollar la comunicación de los bienes culturales y salvaguardar las tradiciones en todas sus manifestaciones. En fin debe buscar una manera de incentivar una mayor participación de la población en estos procesos.

Consideramos que el estudio de las toponimias fundacionales de las poblaciones que hacen parte de la ruta mutis nos brinda la posibilidad de reflexionar acerca de los procesos de colonización y constitución de estos pueblos. Estudiar estos procesos es pertinente, en la medida en que sus pobladores asumieron el peso de una historia que eclipsa otras percepciones, la historia oficial, es decir, desde el momento de la colonia y se han marginado, ya sea por desconocimiento o con intencionalidad excluyente, la historia de los pueblos originarios.